Compañía dio pruebas de coronavirus con resultados falsos.

Además las pruebas hechas a los pacientes se acumulaban en bolsas de basura, afirma la demanda.

El mes pasado, cuando la variante Omicron del coronavirus se propagó por los Estados Unidos, una mujer en el estado de Washington se sintió frustrada después de esperar cinco horas por el resultado de su prueba rápida de coronavirus, pero cuando regresó al sitio, un miembro del personal le dijo que la clínica había perdido su resultado, según los registros judiciales.

La mujer le dijo a las autoridades que se hizo una segunda prueba de coronavirus en el mismo sitio del Centro para el Control de Covid. Pero dos horas después, le dijeron que el resultado de su prueba se había extraviado nuevamente.

Luego, aproximadamente un minuto después, la mujer recibió un correo electrónico notificándole que había dado negativo en la prueba del coronavirus, según los registros judiciales, la mujer fue a trabajar al día siguiente, pero seguía preocupada por la precisión de las dos pruebas. Se hizo una tercera prueba en un sitio del departamento de salud local, según los registros judiciales, y el resultado fue positivo.

Ahora, el fiscal general de Washington está demandando a la clínica con sede en Illinois, su laboratorio y sus copropietarios, Akbar Syed y Aleya Siyaj por supuestamente poner en peligro la salud y la seguridad de miles de habitantes de Washington al no cumplir con las prácticas médicas durante una pandemia.

La clínica, alega la demanda, proporcionó resultados de pruebas de coronavirus “inválidos, falsos y retrasados”, y en ocasiones ningún resultado.

La oficina del fiscal general dice que el Centro para el Control de Covid operaba al menos 13 sitios de prueba en Washington, a pesar de tener una licencia para operar en un solo municipio.

Según la demanda presentada esta semana, la clínica almacenó muestras de prueba en bolsas de basura rojas durante más de una semana en lugar de refrigerarlas adecuadamente. Debido a que las muestras no pudieron analizarse con precisión después de tres días, los trabajadores las fecharon para que el laboratorio las procesara, dijeron las autoridades de Washington.

“Los empleados informaron que la compañía les ordenó ‘mentir a los pacientes a diario’ cuando los habitantes de Washington se quejaron de sus resultados retrasados”, dijo el fiscal general Bob Ferguson (D) en un nuevo comunicado.

En el comunicado se agrega: “El Centro para el Control de COVID contribuyó a la propagación de COVID-19 cuando proporcionó resultados falsos negativos. Estos centros de prueba falsos amenazaron la salud y la seguridad de nuestras comunidades. Deben rendir cuentas”.

El centro y sus fundadores no respondieron de inmediato a los mensajes de The Washington Post la madrugada del miércoles.

Todas las ubicaciones del Centro para el Control de Covid están “cerradas hasta nuevo aviso”, según un comunicado de prensa de la compañía.

“CCC está utilizando esta pausa operativa para capacitar a personal adicional sobre la recolección y el manejo de muestras, las mejores prácticas de servicio al cliente y comunicaciones, así como el cumplimiento de las pautas regulatorias”, publicó la compañía en su sitio web.

Syed y Siyaj, que están casados, comenzaron el negocio en diciembre de 2020 y lo expandieron a 300 sitios en todo Estados Unidos. La compañía comenzó a operar sitios de prueba de coronavirus en Washington en octubre de 2021, según los registros judiciales. A partir del 12 de enero, la compañía anunció PCR y pruebas rápidas gratuitas sin citas, afirma la demanda.

Con material de Washington Post