No puedo respirar


Tenemos que hacer algo diferente. 

Foto: Prensa Asociada

El 2020 nos ha traído un sinnúmero de eventos casi difíciles de creer, nuestro diario vivir cambio radicalmente en cuestión de horas, la forma de llevar nuestra vida se esfumo en días, el curso de la historia cambio cuando el planeta entero se enteraba que un virus estaba corriendo como pólvora.


Foto: Prensa Asociada

Las imágenes y noticia que China construía un hospital en diez días era como 'Mision Imposiblbe' pero los contagiados estaban muriendo en las calles, el sistema de salud colapsaba en horas y como sacada de una película de la pantalla grande, observábamos como el país asiático decidía cerrar sus fronteras y colocaba en cuarentena a la famosa ciudad que no existía para el mundo; Wuhan.

España, Estados Unidos, iniciaron a imponer reglas que nunca antes se habían visto, el Presidente del Concejo de Lynn me dijo: “Esto nunca se había visto, la muerte esta suelta en todo el mundo”, pero ya para ese entonces, muchos estaban en casa, observando la plaga apocalíptica que reducía a los habitantes de Italia.


Imagen: Via Google.


En medio de la pandemia que ponía de rodillas al mundo, los medios de comunicación anunciaban la llegada de un ‘avispón asesino’ a Estados Unidos, los negocios, escuelas, casas de gobierno todos decian; Solo esto faltaba. La  mayoría de personas y atrincherados en casa, parecían David contra Goliat, luchando contra un gigante que hasta el momento se rumora que ya tiene enemigo científico, la famosa vacuna. “Pero yo no me la voy a colocar” dicen muchos escépticos a este virus que ya causó la muerte de 385,000 muertes. (Hasta la redacción de esta columna) 

Parecía que todo volvía a la normalidad, pero un video puesto en la red social, mostraba a un hombre gritando: “NO PUEDO RESPIRAR” y teniendo el lente del teléfono inteligente como testigo, el hombre sufria y agonizaba lentamente por casi ocho minutos con cuarenta y seis segundos. 

Screenshot video.

El uso excesivo de fuerza y poca cordura, fue la mecha para desatar protestas pacíficas solidarias y también violentas y ventajosas en casi toda la nación norteamericana.

“No Puedo Respirar”, “Justicia para George”, es el unísono de una sociedad que reacciono ante la muerte de otro hombre afro-americano, victima del abuso de poder. Desde California hasta New York, de Minnesota a Boston, de Chicago a Texas, millares, claman que se escuche a una comunidad cansada nuevamente de un acto barbárico, “No hay justicia no hay Paz”, se oye desde la infame esclavitud y que causo grandes movimientos  por las marchas sostenidas por Martin Luther King Jr.

Bill Hudson - Prensa Asociada

Agencia de Noticias.

Pero al parecer esto no ha cambiado, “Tenemos que hacer algo diferente”, dice un video que circula en la red social, “Diez años a partir de ahora, tenemos que buscar una mejor forma de cambiar las cosas” grita un hombre afro-americano a dos hombres, uno de sesenta y otro de dieciséis años de edad que se unían a las protestas pero reflexionaban al momento de escuchar el desesperado clamor. 

Pero, ¿qué hacer en una sociedad donde el prejuicio, intolerancia es enseñada en casa, televisión, periódicos, revistas, películas, escuelas, universidades y hasta por líderes políticos?

No hay duda alguna que la inmortal pregunta hecha por el Pacifista, Dr., Soto sigue haciendo sentido y asunto de analisis: ¿Dónde empezó el Holocausto? A lo que él respondió, “En la mente de Hitler”, “Nadie nace odiando a otra persona por su color de piel, su origen o su religión” fueron las palabras de Nelson Mandela. “Un niño, un profesor, un libro y un lápiz pueden cambiar el mundo” dice la Premio Nobel Hindu; Malala Yousafzi.  

Luchar contra el odio quizás no ha sido la mejor estrategia, la deshumanización ha sido un acto histórico que ha sido imposible borrar en las mentes de miembros de la sociedad que claman por jerarquía racial.

¡Urge un cambio radical en los sistemas educativos y de justicia!

Es probable que cambiar el método y estrategia educativa que se brinda en los planteles escolares, centros religiosos, casas de gobierno, en el hogar, hará que abunden mas hechos de tolerancia y por ende respeto a la dignidad humana.



Juan González
Fundador
Revista Sin Fronteras.














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